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Este vecino se agotó de que la gente utilizara su piscina

La súplica de una madre

Aunque Greg cuando escuchó la pregunta sobre si podía prestarle la piscina a los niños, no estaba convencido, Sandra suplicó a la pareja que permitiera que sus hijos y otros niños del vecindario usaran su espacio para que puedan disfrutar que estuvieran en un entorno seguro.

Además planteó la posibilidad de mantener de esta manera a los niños ocupados y entretenidos durante el verano. Pero la pareja estaba muy dubitativa con la respuesta. Jeanne, con su corazón amable, consideró la propuesta, pero Greg no estaba convencido.

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